¿VACUNACIÓN OBLIGATORIA?

 ¿VACUNACIÓN OBLIGATORIA?

Se está ya abriendo el debate sobre la vacunación obligatoria, de momento en los centros de trabajo. La cuestión es si cabe exigir someterse a la vacunación como medida de prevención de riesgos laborales para proteger al trabajador, a sus compañeros o a terceros de acuerdo con el art.22 de la Ley de prevención de riesgos laborales.

Los tribunales están ampliando los supuestos de reconocimientos
médicos obligatorios por motivos de prevención de riesgos laborales, la vigilancia de la salud, en chóferes, conductores de ambulancias, personal de extinción de incendios forestales y en otros casos, no sin cierta polémica, y puede que decidieran asimilar el Covid-19, ya veremos. Aunque en sí mismo no es un riesgo laboral, salvo en el caso del personal sanitario, una vez estamos en ambientes de trabajo podría caerse en la tentación de considerarlo como tal e incluirlo en el plan de prevención. Creo que sería un error y que sería mejor que la obligatoriedad viniera de la intervención de la autoridad sanitaria, desde fuera, lo que sería, a mi juicio, jurídicamente más ajustado al concepto de prevención de riesgos laborales pues la cuestión seguiría siendo sanitaria más que directamente laboral y no quedaría en manos del empresario.

JUAN LÓPEZ GANDIA

La vacunación de los niños hace tiempo que se consideró obligatoria para proteger su salud y la de los demás, pero parece olvidarse. A los testigos de Jehová se les impuso transfusiones de sangre, a las que se negaban. Hasta a las mascotas hay que vacunarlas...De nuevo surge esa idea irresponsable privatizada de libertad para oponerse a la obligatoriedad. Cuando las decisiones individuales tienen repercusiones colectivas dejan de serlo, como dejan de serlo por ejemplo para los que conducen con tasas de alcoholemia y deben someterse a controles.

En el caso del Covid1-19 el discurso neoliberal, propio de una sociedad en la que el modelo individualista se ha hecho hegemónico, resulta curiosa la defensa de esa decisión individual y a la vez la apropiación de lo colectivo con fines privados, el mundo al revés. Así cuando los que dicen ejercer un derecho no adoptando individualmente medidas contra el Covid se contagian reclaman luego su derecho público y colectivo a asistencia sanitaria, gratuita, a costa de los demás y saturando los hospitales...Ahí parece que dejan de ser individualistas y piden que les cuide la mamá, o mejor el papá Estado de cuya intervención antes han renegado y para cuyo mantenimiento rehusan muchas veces pagar impuestos o cuyos recortes han apoyado.

JUAN LÓPEZ GANDÍA